La expresión «six sigma» (seis sigma) lleva varias décadas circulando en el mundo empresarial. Este enfoque se aplica en campos cada vez más diversos y variados. Sin embargo, sigue siendo un concepto misterioso e incluso muy ajeno para muchas personas. Si piensas estudiar una Maestría en Gerencia de operaciones y logística, enseguida te enseñamos qué es six sigma.
Según el Blog Gestion de Projet, la metodología six sigma, orientada a la calidad, tiene como objetivo reducir la variabilidad de un proceso a cero defectos. Se trata de un enfoque que se basa tanto en la opinión del cliente (encuestas) como en datos medibles (indicadores) y fiables.
Esta metodología se utiliza para reducir y eliminar los defectos en los procesos de producción (u otros) y en los mismos productos. Por consiguiente, tiene como objetivo mejorar la calidad general del producto y de los servicios.
De igual forma, estimula a una empresa a adoptar acciones medibles y efectivas para satisfacer mejor a sus clientes, involucrar a los equipos y muchas veces, permite mejorar su imagen. Por ello, es una estrategia que busca la mejora continua del desempeño de una empresa.
En 1986, Motorola, una firma estadounidense cuya sede se encuentra en los suburbios de Chicago, creó la metodología six sigma. Fue así como la firma registró la marca Six Sigma®. El objetivo principal del método era aumentar la satisfacción del cliente mejorando la calidad de los procesos de producción.
El primer campo de aplicación de esta metodología fueron los procesos industriales, pero luego su uso se extendió a otras áreas como los procesos logísticos, administrativos, comerciales e incluso el ahorro de energía.
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Al implementar la metodología six sigma, se mejora la calidad del producto y, por lo tanto, el desempeño de la empresa. Esto es posible gracias a la reducción de los desperdicios, reprocesos y ajustes.
En el Blog Gestion de Projet se señala que al adoptar el enfoque six sigma, se puede:
Para que la metodología sea eficaz es necesario tener en cuenta lo que piensan los clientes, es decir, conocer y analizar sus opiniones. Por lo tanto, establecer un enfoque six sigma implica primero encuestar a los clientes sobre sus necesidades reales.
Esto se puede hacer mediante cuestionarios, encuestas en línea, un equipo de ventas y el análisis de las quejas. Las herramientas web, como el generador de encuestas de SurveyMonkey, son útiles para facilitar este trabajo.
Una vez que se determinan claramente las necesidades del cliente, la metodología six sigma podrá cuestionar la capacidad de los procesos de la organización para entregar el producto o el servicio esperado. Como ves, el método six sigma tiene un enfoque orientado hacia el cliente, los procesos y los indicadores. Por ende, consiste en:
Por consiguiente, la metodología six sigma emplea la herramienta DMAIC —por sus siglas en inglés—, la cual consiste en 5 fases: definir, medir, analizar, mejorar y controlar (define, measure, analyze, improve y control). Cada paso de la DMAIC tiene diferentes aplicaciones. A continuación, te mostramos algunos ejemplos extraídos del Blog Gestion de Projet:
Ahora ya sabes qué es la metodología six sigma y para qué sirve. Este método tiene el objetivo de mejorar la calidad de producción de una empresa para que su oferta cumpla con las expectativas de los consumidores. Además, esta estrategia tiene una gran demanda en la actualidad por parte de las compañías que buscan mejorar continuamente su oferta.
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